Trabajar con los consejos de Tarot - Encabezado Trabajar con los consejos de Tarot - Encabezado

Trabajar con los consejos del Tarot

¿Cuándo resulta productivo pedir Consejo al Tarot? ¿Cómo frasear la pregunta? ¿Cuántas cartas utilizar? Acá van unos Tips de Tarot que pueden ser útiles.

DEJAR EL CONSEJO PARA EL FINAL

Una Tirada de Tarot nos ayuda a CLARIFICAR lo que nos pasa y a ORDENAR nuestra propia interioridad. Si el Consejo de Tarot se pide al final, el Consultante ya tiene una perspectiva mucho más transparente de lo que le sucede y el Consejo funciona como una conclusión a la que muchas veces el propio Consultante ya ha llegado. De esta forma empoderamos al Consultante en vez de debilitarlo y que sienta que él/ella depende de lo que diga el Tarot.

USAR UNA SOLA CARTA PARA EL CONSEJO

Menos siempre es más. La carta de tarot que utilizamos como Consejo necesita ser aprovechada al máximo y cuando agregamos otras, diluimos su potencial. Por ejemplo, una Reina de Copas, (1) está recomendando cuidarse, nutrir y alimentar la situación, pero también (2) nos advierte sobre el riesgo de dejarse desbordar por la sensibilidad, (3) nos pide diferenciar protección de ostracismo emocional, (4) nos sugiere buscar a alguien amoroso que nos apoye, (5) nos alienta a proteger a otros, (6) a ejercitar nuestra intuición, etc.

FOCALIZAR LA PREGUNTA

Si estamos abordando un tema concreto, pidamos un Consejo concreto. Por ejemplo, en vez de “¿cómo puedo mejorar la relación con mi jefe?” puede resultar más efectivo preguntar “¿cuál es el mejor recurso que puedo poner en juego para trabajar con mi jefe en el proyecto de esta semana?”.

EL CONSEJO PROVIENE DEL CONSULTANTE FUTURO

Suena raro, si. Pero una forma muy interesante de pedir Consejo al Tarot es formularlo desde el propio Consultante. Por ejemplo, la pregunta puede ser: si ahora tengo 30 años, ¿qué consejo me daría mi “yo” de 40 años mirando retrospectivamente esta situación?

Siempre es súper importante que el trabajo con el Tarot fortalezca la autonomía y la independencia del Consultante, que lo lleve a registrar sus recursos, talentos y capacidad de acción, evitando siempre depositar en el Tarot la responsabilidad sobre la propia vida.