El Tarot es un Lenguaje Simbólico y por eso siempre insistimos en la importancia de comprender la diferencia entre un signo (que sólo tiene un significado) y un símbolo (que tiene muchos). La gran dificultad para el/la Tarotista principiante es ejercer el arte de la interpretación de los símbolos porque por ej, la palabra “casa” (un signo) sólo significa una cosa, pero una Carta de Tarot (símbolo) puede aludir a una multiplicidad de cuestiones.
Si estás comenzando, te invitamos a crear una Tabla de Palabras para las cartas:
Por ejemplo, para El loco podés usar “espontaneidad”, “libertad”, “amor”, “inconsciencia”, “creatividad”. La Fuerza puede incluir “fortaleza”, “control”, “coraje”, “cooperación”, “paciencia”. El mundo podría leerse como “unidad”, “logro”, “final”.
Luego de armar tu Tabla de Palabras, es interesante jugar con las combinaciones y distinciones. Por ejemplo, la palabra “responsabilidad” es asignable a El Emperador pero también a La Justicia por lo que sí aparecen juntas en una Tirada, sabemos que allí hay una insistencia a la que prestar atención. Pero a la vez, ¿cuál es la diferencia? Las demás palabras de la Tabla pueden ayudar a distinguirlas, por ejemplo “compensación” o “equilibrio” serán palabras para La Justicia, pero no para el Emperador, mientras que “autoridad” y “disciplina” le corresponderan a él pero no a ella.
Este ejercicio puede ayudarte a seguir aprendiendo. Ahora bien, ¡ATENCIÓN! Las palabras son disparadoras, pero que no te limiten. No encierres una carta allí, porque entonces la estarás tratando como un signo en vez de como un símbolo. La idea es que sean un punto de partida, un lugar donde hacer pie para despegar.