Carolina Feller Carolina Feller

Carolina Feller

Caro Feller, 51 años, estudió 4 años en la Facultad de Psicología y Magisterio en el ISFD N° 9, recibiéndose de Maestra en Educación Primaria.

Ya siendo mamá de sus dos hijos, decidió estudiar la carrera de Contador Público. Una vez recibida pudo unir su profesión a la Docencia, donde se desempeñó como Ayudante Diplomada en la U.N.L.P.

En ese ínterin descubre el mundo del Tarot, que empieza a investigar primero de forma autodidacta y luego con una maestra que empieza a formarla. Realizó varios cursos cortos en Buenos Aires y terminó de formalizar su formación en Lecturas de Cielo con Sole en el 2016. Luego siguió formándose a través de distintos cursos y talleres, el último en Tarot Genealógico.

 Hace más de 10 años que lee el Tarot en forma particular y desde hace 4 en Lecturas de Cielo, donde además de dedicarse a la Consultoría, se desempeña como Docente de la Formación en Tarot, pudiendo así unir sus dos pasiones: el Tarot y la Docencia

Amor por las Cartas

Sole presenta a Caro

 

Creo que fue en el 2018 que recibí un mensaje inesperado de Caro: "Hola Sole! Hace días que estoy por escribirte y acabo de leer un post de Lecturas de Cielo que me dijo: ¡es ahora! Quería decirte que si necesitas ayuda en las clases, me encantaría que cuentes conmigo…". Leerlo fue pensar: ”¡esto es todo lo que está bien!”

Caro estudió Tarot conmigo pero llevaba mucho tiempo investigando el mazo y se le notaba. Fue una alumna callada y observadora, pero cuando rompía el silencio, era un placer encontrarse con la lucidez de sus reflexiones y su amor por las cartas. 

Yo ya le derivaba Consultantes que no podía atender y cuando recibí el mensaje, estaba en plena búsqueda de una Docente de Tarot. Ahora me resulta tan obvio que era ella, que no puedo creer que no haya pasado antes.

A Caro el Tarot la atraviesa en múltiples capas. No solo "sabe" intelectualmente, sino que lo vibra, lo siente interiormente, cada imagen la habita de manera íntima. Vivir así cada símbolo, experimentar esa conexión, es todo lo que yo quisiera para un Tarotista y sobre todo, para nuestros estudiantes. 

Hoy decir Tarot en Lecturas de Cielo, es nombrarla a Caro. No solo da las clases de nuestra Formación en Tarot sino que atiende a la mayoría de les Consultantes. No pocas veces le pido perdón porque confío tanto, que la dejo sola en el hacer. Entonces me llama: "pero Sole, decime, ¿te parece bien que dé la clase así?" (¡la paciencia que me tiene!).

Les estudiantes la aman. Prepara las clases con una dedicación increíble y tiene arte para interpretar lo que un grupo necesita. La profundidad de sus clases reproduce la búsqueda de Lecturas de Cielo: que estudiar Tarot sea un proceso de transformación. Y ella genera eso naturalmente, más allá de que se alinee con nuestro espíritu.

Trabajando juntas, descubrí además a una mujer de esas que son de fierro, de las que queres hacerte amiga. Y en eso estamos, lo cual es un plus hermoso. Ya anda inspirada escribiendo cosas para nuestras redes sociales, así que en cualquier momento les sorprende con sus textos. 

Feliz de presentarte por aquí, aprovecho para brindar con vos Caro: ¡por mucho más viaje juntas!

Muchos besos,

Sole

PD Les comparto uno de los textos que Caro escribió para nuestras redes sociales

Si no cortas con la izquierda, ¡funciona igual!

Por Carolina Feller 

 

Estaba de viaje en Mendoza, tenía consultas y había dejado mis mazos en casa. Voy al centro en busca de uno y no encuentro ni una librería que venda alguno. Termino encontrando un Tarot Marsellés en una santería. 

Entramos en la tienda. Mi marido estaba  indignado, escandalizado: "¿pero qué tiene que ver lo que vos hacés con todos estos amuletos, santos, mini budas, estampitas, etc.?"

¡Absolutamente nada! Las cartas de Tarot son cartones con imágenes y su “poder” vive en sus símbolos. No creo en los mazos mágicos. 

Tampoco el poder está en mi persona: no soy ni vidente, ni adivina;  soy  una apasionada por los lenguajes simbólicos, y una enamorada del arte de leer el Tarot.

El poder tampoco está en la “vibra” del consultante: no es necesario ni que se descruce, ni que esté en ayunas, ni que corte con la mano del corazón, ni siquiera que toque las cartas.

El verdadero poder está en el vínculo entre el que lee y el que es leído, y éste trasciende fronteras, presencialidades, contactos físicos.

Los símbolos del Tarot son un puente entre el consultante y su propio inconsciente, y en su recorrido, el consultor le acompaña en una integración de símbolos, afectos, vivencias, deseos. 

A través de este proceso el consultante toma poder sobre sí mismo, siempre que tome conciencia del mensaje de los Arcanos y lo que ellos resuenan en su vida. 

A partir de un proceso de creación conjunta,  las emociones son removidas y transformadas a través del diálogo, y esto tiene que ver más con el Amor que con la adivinación.

El principio que funciona es el de la sincronicidad: hay relaciones “acausales”,  que no podemos demostrar a partir de la lógica entre dos hechos, pero sí llenan de significado a una situación planteada. 

Así, sale la carta “que tenía que salir”: porque el inconsciente del tarotista está conectado con el del consultante, y el del consultante lo está con las cartas en el momento de hacer la pregunta. Y para esto, no es necesario que corte con la izquierda.

Les espero en el Consultorio

Carolina